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¿Qué bebo en un bar?

Cuando a un dietista le preguntas ¿Pero qué bebo cuando salgo por ahí? Que sepas que nos pones en una tesitura muy complicada. Por un lado, nuestro consejo siempre ha de basarse en la salud y lo más recomendable, pero por otro lado te queremos dar soluciones y alternativas reales que puedas aplicar a tu día a día. Cuando tenemos que elegir, hay barajar todas las posibilidades y ponerles su etiqueta: buenas, menos buenas y las malas. Porque sí, hay alimentos y bebidas buenas y alimentos (productos) y bebidas malas. Que no te cuenten milongas de que hay que tomar de todo en su justa medida. Eso es tan absurdo como decir: hay que drogarse un poquito cada día, si es poco…. No pasa nada. O hay que fumar un par de cigarros al día, que es bueno.

La buena, la fea y la mala.

En cuanto a bebidas se refiere, vamos a partir de la bebida perfecta y de ahí, vamos bajando el ranking. Antes de nada, aclarar que cuando hablamos de bebés de 0-12 meses, la leche materna o de fórmula sería la mejor bebida y alimento a su vez. Este post, por tanto, es para personas adultas, incluso vamos a hablar de mayores de 18 años para evitar equívocos en cuanto algunas recomendaciones, de cerveza por ejemplo.

1. AGUA.

Como habrás podido intuir, el agua está sin duda en el número 1 de nuestro ranking. Dependiendo de la zona y del tipo de tratamiento, el agua del grifo puede ser la mejor opción, o agua filtrada en caso de no tener unas condiciones óptimas para su consumo. Pero, por norma general, en España el agua corriente será apta para un consumo humano.

Si tienes que comprar agua embotellada por una calidad deficiente del agua de grifo de tu zona, intenta reciclar los envases. El impacto medioambiental de este tipo de envases es enorme. Tenemos la responsabilidad de reducirlo en la medida de lo posible.

2. INFUSIONES.

Se trata de agua caliente con alguna hierba/especia infusionada. Si las tomas sin cafeína (teína) mejor aún. Roiboos, poleo menta, canela, anís, manzanilla, frutos rojos, manzana, etc. Pregunta y seguro que tienes alguna alternativa que te guste.

En verano puedes optar por infusiones granizadas, heladas o simplemente pide un vaso con hielos y lo echas en él al acabar de infusionar. Si la traen con el hielo preparada, vigila que no le añadan azúcar (suelen prepararlas con bastante cantidad).


3. AGUA SABORIZADA.

A base de frutas, pepino, té, especias… la imaginación al poder. Es cierto que fuera de casa te costará más encontrar esta alternativa, pero cada vez hay más locales que las ofrecen. Una buena forma de hidratarte sin introducir colorantes, saborizantes artificiales, fosfatos, azúcar o edulcorante. Pásate a esta opción y descubre los nuevos matices que puede tener el agua.

4. AGUA CON GAS.

Si eres de los que necesita ponerle un poco de alegría a aquello que bebe, esta opción es bastante aceptable. Agua con un poco de chispa, que te dará un toque distinto y agradable.

Fresca con una rodaja de limón, puede ser una buena elección.

Pegas: el exceso de agua con gas puede acumular más gases, por lo que está contraindicado en caso de colon irritable, reflujo gastroesofágico, o dificultades de respiración.

5. ZUMO DE TOMATE.

Puntualizo de tomate, ya que otro tipo de zumos contienen un exceso de azúcares libres nada recomendable. Así que, recuerda: tomate. Es sencillo de encontrar, suelen prepararlo con pimienta, sal. Refrescante, hidratante y delicioso.

Un zumo de zanahoria también puede ser una buena alternativa. Pero huye de aquellos comerciales con azúcares añadidos.

6. CERVEZA SIN ALCOHOL.

Esta recomendación es únicamente para adultos. Si se trata de adolescentes que aún no beban (o no deben beber) bebidas alcohólicas, descartaríamos esta alternativa ya que puede acostumbrarles al sabor de la cerveza, y no es nada recomendables.

Si has quedado para salir “de cañas” piensa que puedes ir alternando agua, una sin alcohol y una caña normal. De esta manera beberás solo una tercera parte que si bebieras solo cerveza o vino. Beneficios: beberás menos, alcohol, más hidratado, menos resaca al día siguiente y menos kilocalorías. Y no tienes por qué renunciar a quedar y salir ¡Todo ventajas!.

7. GASEOSA.

Se trata de una bebida edulcorada y carbonatada. No contiene fosfatos (E338), que afectan a nuestro metabolismo del calcio. Tampoco contiene cafeína.

Ya empieza a ser un poco más "fea" que las alternativas anteriores, por su adición de edulcorantes, pero al menos no contiene otras sustancias muy dañinas que sí llevan otras bebidas refrescantes.

8. ZUMOS.

Ya entramos en las opciones a evitar, las malas. Los zumos, por su alto contenido en azúcares libres, han de tomarse de forma muy esporádica. SI es natural recién exprimido, al menos tienes las vitaminas naturales disponibles. Si es un zumo industrial, ni eso. Piensa que tomar un zumo es como echarle 3 cucharadas de azúcar a un vaso de agua y beberlo. De saludable, poco.


9. REFRESCOS AZUCARADOS /EDULCORADOS.

Por su estrecha relación con la diabetes, obesidad y enfermedades coronarias. Por sus efectos nocivos para el estómago, esmalte dental e intestino. Por su elevado contenido en azúcar y edulcorantes, no son nada recomendables para la salud. Por su contenido en ácido fosfórico, que altera nuestro metabolismos del calcio haciendo que excretemos calcio de nuestros huesos y dientes para recuperar el equilibrio que alteran. Por sus implicaciones medioambientales (agotamiento de recursos, contaminación). ¿Necesitas más razones? Nunca los recomendaría.



10. CERVEZA Y VINO.

Recuerda que ya estamos en las malas. La cerveza, pese a tener muy buena prensa y ser una de las bebidas más vendidas a nivel mundial, contiene alcohol, un neurotóxico relacionado con multitud de enfermedades, accidentes de circulación, violencia, etc. Recomendar a la población beber alcohol sería tan aberrante como recomendarles fumar. Por mi parte no lo recomiendo en ningún caso. Si decides tomar una cerveza o una copa de vino recuerda que es bajo tu responsabilidad, cuanto menos mejor.

11. BEBIDAS DE ALTA GRADUACIÓN.

Si el alcohol presente está en grandes cantidades, sus daños serán aún mayores. Por ello, las ponemos en el destierro total de las posibles elecciones. Además, estas bebidas suelen acompañarse de las presentes en el punto 9, así que, doblemente “malas”.

Sé que suena soso y aburrido, que queremos encontrar milagros y opciones saludables en cosas que no lo son. La única forma de cuidar nuestro cuerpo es evitando determinadas sustancias que son claramente dañinas. En tu mano está. Decide con cabeza.

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