Corre con tu perro
En este artículo os dejo unas cuantas consideraciones a tener en cuenta si os planteáis correr con vuestro mejor amigo:
Si vas a adoptar un perro y sabes que te le llevarás a trotar:
Ten en cuenta el clima de tu zona para escoger a un animal con un pelaje adaptado a ese medio.
Busca un perro joven y vital. En la protectora te aconsejarán bien.
Escoge un perro con una complexión “atlética”. Un cuerpo proporcionado, ni grande (futuros problemas articulares y un nivel de energía menor), ni pequeño (le costará seguirte). Los de hocico chato suelen tener problemas respiratorios.
El golpe del calor. Los perros tienen menos capacidad que nosotros para disipar el calor que generamos al movernos. La temperatura corporal al correr puede llegar a los 40 grados. Todos los órganos de su cuerpo se adaptan para trabajar en estas condiciones salvo el cerebro. Un golpe de calor puede ser mortal. Mis consejos:
Madruga si quieres correr con él para que el sol no os castigue.
Si el verano en tu ciudad es duro (pongo Madrid como ejemplo) no corras tampoco por la noche. El ambiente estará muy seco y recalentado.
Busca recorridos donde podáis refrescaros con fuentes para beber y para mojarse. Agradecerá que le empapes la tripa y la cabeza sobre todo.
No te limites a correr. Para que le merezca la pena acompañarte, deja que olisquee mientras estiras y acaba la sesión con un paseo. Trota sobre el sitio si hace falta para que huela tranquilo. Si este comportamiento es constante y te irrita plantéate si te merece la pena bajar con él. Probablemente ninguno disfrutéis.
Escúchale. Nuestro amigo no puede decirnos cómo se encuentra. Observa sus orejas, las cejas y la cola cuando le llames para salir. Por su comportamiento en casa puedes ver si no se encuentra bien. También si corriendo se descuelga y lleva la boca cerrada. Observa cómo actúa con la lluvia o el frío. Del mismo modo debes darte cuenta de cuándo llega el momento de retirarle del running.
¿Disfruta? Finalmente, fundamental, fíjate si disfruta corriendo o si realmente lo que hace es seguirte a la desesperada para no perderte. Corremos porque nos divierte ¿verdad?